Llegó el verano y con él, el cuidado de los parquets de exterior, ya sea en piscinas, terrazas o en lugares muy húmedos del hogar.

Las tarimas exteriores son muy decorativas y dan ese toque especial al  suelo de las terrazas haciéndolas más cálidas y confortables, pero ¿Sabes el cuidado que llevan?

La madera, ya que se trata de un “material vivo” y por ello el cuidado debe ser mayor. Debido a las inclemencias del tiempo y a los bruscos cambios de temperatura, en verano la tarima esta sometida a las condiciones ambientales extremas por efecto de los rayos U.V.A., y pueden aparecer micro fisuras. Así pues, la exposición al sol y la humedad pueden generar un mayor deterioro en la madera haciendo incluso que cambie de color o que se resquebraje. Para evitarlo debemos tratarla mediante una capa de barniz de poliuretano o un aceite específico para el tipo de madera que sea la tarima. Es recomendable hacerlo dos o tres veces al año. Además también es recomendable limpiar la madera frecuentemente con un paño húmedo. No hay que olvidar que para una mayor eficacia debemos de limpiar la madera antes de aplicar los productos.

Su aplicación se realiza con un paño, una almohadilla o un rodillo, se debe pasar una mano más bien generosa de aceite de teca siguiendo el sentido de la veta de la madera. Después de unos minutos, conviene quitar el exceso de aceite, si lo hubiera, con un trapo limpio. Esta primera capa tiene en la madera un efecto impermeabilizante. Se recomienda dar una segunda mano unas seis horas después de la primera.

Cubriendo la madera periódicamente mantendrá su color original prolongando su aspecto y su uso. Los especialistas recomiendan que la aplicación de productos se realice, al menos, dos veces al año: una en primavera y la otra en otoño. Esto brinda a la madera la ayuda para tolerar las épocas de clima más riguroso.

En los días de mucho calor se aconseja «regar» el suelo de madera, con el fin de refrescarla y humedecerla. De esta manera, se protege al suelo de posibles rajaduras o de un mayor desgaste.

Diferentes cuidados

• Si la madera es barnizada utiliza una mezcla de agua y vinagre y aplícala con una fregona. No utilices cera.
• Si es madera decapada utiliza agua tibia y sal. Por cada litro de agua utiliza medio vaso de sal.
• Si tiene un tratamiento al aceite, repara los arañazos con cera al aceite. Para eliminar manchas hazlo con un paño y detergente suave.

Esperamos que los consejos sean de utilidad ya así vuestros parquets tengan una larga vida. Si tienes alguna duda contacta con nosotros.