Seguro que ya has escuchado hablar de la decoración industrial. Y si no es así, probablemente hayas estado en un establecimiento que disfrute de este tipo de decoración: cafeterías que son punto de encuentro para hacer un brunch, espacios de co-working, tiendas de ropa de marcas que empiezan a hacerse sonar en el mercado, etc. Sin miedo a equivocarnos, podemos decir que el diseño industrial está de moda y que cada vez son más los que apuestan por él para capturar la atrapar la atención de sus clientes. Tuberías de todos los tamaños, abundacia de metales y de expresiones minimalistas, colores fríos. Son elementos cada vez más presentes en el interiorismo y para conseguir el efecto deseado deben aliarse, una vez más, con el suelo adecuado.
Las opciones, como siempre, son varias. Muchos deciden emplear el microcemento, componente también al auge para conseguir zonas depuradas y generar superfícies armónicas con respecto al resto de elementos clave de la decoración. Otros apuestan, por ejemplo, por el mosaico hidráulico, un tipo de suelo que en su día cayó en desuso y que cada vez lo encontramos con más frecuencia recuperado en suelos de oficinas, tiendas y casas.
Lo que nos interesa, sin embargo, es hablar de la madera. La madera, como ya sabéis, es una opción que siempre podemos aplicar y que se adapta como ninguna otra a cualquier estilo decorativo. En el caso del diseño de estilo industrial puede darnos mucho juego, sobre todo cuando trabajamos en estancias en las que predominan colores claros mezclados con las tonalidades metálicas de tuberías y demás. En esos casos, la presencia de una buena tarima o parquet ofrece un contraste perfecto que contrarresta el aspecto frío en el que pueden correr el peligro de caer algunos de esos espacios.
Y aquí, de nuevo, hay un enorme abanico de posibilidades. Los hay que se decantan por reutilizar pavimentos viejos o reciclados para llevar un paso más allá la expresión de lo industrial. Sin embargo, esta opción corre el riesgo de sufrir en exceso el paso del tiempo. Un parquet nuevo, por ejemplo, con diseño de una sola lama, puede ser una excelente idea en espacios abiertos, ya que amplían y ayudan a unificar, de esta manera creando una amplitud siempre bienvenida. Y ya que entramos en este terreno, el parquet industrial se forma de tablillas de madera de perfil y es extremadamente resistente. Sus prestaciones, unidas a su fuerza estética, suponen un seguro a la hora de dar forma a nuestro diseño. Como es habitual, la madera es un clásico que nunca falla.
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